Muchas veces nos gustaría que nuestro perro nos pudiese contar lo que pasa por su cabecita loca. Ellos no comparten nuestro idioma, no nos van a decir »no me gusta ese perro»; pero sí usan el suyo propio y, si logramos interpretarlo, será mucho más fácil entender el porque de las acciones de nuestros amigos peludos. Hoy descubrimos las señales de calma.
Este tema da para mucho, y podría aburriros con un post larguísimo del que acabaríais hartos. Por eso voy a publicar pequeños post en los que hablaré de las diferentes señales de calma que nuestro perro utiliza y su significado.
Si queréis profundizar más en este tema, os recomiendo el libro »El lenguaje de los perros: Las señales de calma» de Turid Rugaas. En él nos habla de las señales de calma y su significado y nos muestra ejemplos de situaciones en las que podemos observarlas. Nos enseña también, en los casos en los que sea posible, cómo emplearlas para interactuar con nuestro perro.
¡Vamos con la primera de ellas!
Lamerse el hocico
Suele ser un movimiento muy rápido, tanto que muchas veces ni lo notamos. Con él, nuestro perro está transmitiendo calma; nos esta diciendo a nosotros, a otro perro o a sí mismo: »Tranquilo, no pasa nada».
¿Cuándo podemos observarlo? Una vez que conocemos las señales de calma, es mucho más fácil identificarlas. Si es la primera vez que lees esto tal vez pienses: »mi perro no hace eso». Pero si centramos nuestra atención en una señal y lo vamos observando durante unos días, descubriremos que nuestro perro la usa ¡Y mucho!
Lo ideal es intentar visualizar las señales de una en una. Una vez que comencemos a hacerlo, con el tiempo nos irá resultando más fácil. Además, es mucho más sencillo comenzar la observación en casa, donde todo pasa mucho más lentamente que en la calle.
Si pones atención, podrás observar que tu perro se lame el hocico cuando le abrazas, le das un beso o le vas a poner un collar o arnés.
En la calle también es común que nuestro perro emplee esta señal cuando otro perro se acerca. De esta forma, le está indicando que »va de buen rollo».
¡Espero que os haya gustado! Y sí os animáis a observar a vuestro perro ¡Contadnos cómo ha ido!